miércoles, 26 de diciembre de 2012

NATALIA




- "Reconocer a los "diferentes" el derecho de vivir precisamente como diferentes, es reconocerles el derecho a vivir en la marginación".
Mario Mieli

Este proyecto nació en enero de 2012. Se trató de una idea base a la cual le di quinientas cincuenta mil vueltas en mi cabeza antes de ejecutarla. Aunque se trata de una historia corta, el guión original fue evolucionando muy lentamente, para ser más preciso, hasta un par de semanas antes del rodaje, que se realizó el 16 de junio. Rubén Esperanza, quien también participó en El Periodista y El Camarero, se reunió conmigo y juntos armamos el equipo de trabajo.

Al poco tiempo convocamos a un casting, Natalia Plascencia de la Torre nos deslumbró a todos, más allá de su físico, que sin duda es radiante, emanaba una energía brutal. Era, básicamente, lo que estaba buscando. Algo muy parecido sucedió con Laura Esmeralda, quien además desempeña un rol de importancia extrema dentro del cortometraje, cuando hicimos el casting todos coincidimos en que ella tenía que estar con nosotros, y así fue, su belleza y entusiasmo fueron claves para el día de rodaje.

Rodamos, se trata de un plano secuencia, y la posición de la luz era clave para la historia que quería contar, de manera que sólo contábamos con 15 minutos para que el sol no se ocultara. Lo logramos.
Luego apareció Jean de Oliveira (Candy 66) a hacerse cargo de la música. Nunca el "están hechos el uno para el otro" había sido tan preciso como en este caso puntual. Simplemente le dio ese toque que tanto buscaba. La música fluyó e hizo su trabajo, de la mano de un músico que, personalmente, admiro mucho.

Por tema de festivales no es posible publicarlo ahora, pero pronto se hará.

Aprovecho para agradecer, una vez más, a mi equipo de trabajo, Carlos Guijarro, Camila Rigali, Aida Lamrissi, Rubén Esperanza, Carlos Canseco, Miguel Ruiz, entre otros. Sin ellos, imposible este proyecto, así como también Natalia Plascencia, Laura Esmeralda, Borja Fernandez, Michel de Blois, Rodrigo Moreda, Andreína Ruiz y Mikel Iturroz. Grandes compañeros todos. 

Melodía de un Recuerdo

¡Cuanto tiempo!
Sería irresponsable de mi parte culminar el 2012 sin una actualización decente de este blog. Parece mentira, pero es suficiente que se te pase algo importante que colocar para que el resto de los eventos pasen desapercibidos en este extraño efecto dominó. Lo cierto, es que tanto antes como después de 5 ACERO nacieron algunas historias. Son las ganas de seguir explorando en diversos géneros lo que me ha llevado a realizar estas obras.

MELODÍA DE UN RECUERDO (Rodada en abril de 2012)

Un hombre mayor que hace un viaje a través de sus recuerdos para reflexionar acerca de su comportamiento para con sus seres más cercanos, probablemente sea demasiado tarde para reconstruir con las manos lo que ha destruido con los pies... Bastante atrevido de mi parte escribir una sinopsis que no me corresponde, pero es que no la conseguí en internet, tal vez cuando Rodrigo (su autor) la lea, se encargue de enviarme la oficial.

Una obra audiovisual escrita y dirigida por Rodrigo Moreda en la cual tuve la oportunidad de participar como Director de Fotografía. Honestamente era mi primer proyecto serio ejerciendo esa función, 2 días de rodaje y sorpresas por doquier. He de destacar que se trataba de una práctica de la Escuela Séptima Ars, en Madrid, que realizamos en conjunto los alumnos de Cámara e Iluminación de Cine y los chicos de Dirección. Una de las particularidades de este proyecto fue la oportunidad de poder rodar en película de 16mm. Rodrigo y yo nos comunicamos bastante bien, hubo mucho respeto en el desarrollo de nuestro trabajo individual, tal vez un par de altercados durante el primer día de rodaje que luego quedaría como una graciosa anécdota.
Como es normal en cualquier escuela, los procesos de postproducción fueron bastante largos y engorrosos, luego del montaje acudí, junto al operador de AVID a realizar la corrección de color, fue allí cuando vi por primera vez el producto de aquel trabajo, era cuestión de detalles para etalonar y ver el resultado final. Desafortunadamente aquel trabajo se perdió entre muchos otros archivos, y al cabo de unas semanas apareció sin detalles aparentes.
Durante estas prácticas, una de mis funciones más comunes fue hacerme cargo del transporte de todos los equipos de cámara e iluminación, entre otras cosas, y lo hacía con un gusto inmenso, lo curioso es que justamente en este rodaje, no lo fui, pero me encargué del Tetris. Mi tetris, Mío, Mío. Tetris: Arte de ordenar cientos de piezas de cientos de tamaños distintos en una Ranault Kangoo de 2 metros cuadrados, donde por cuestiones lógicas, no caben.